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El ciclismo vuelve a ponerse un dorsal en una Vuelta Ciclista a Burgos de mucho nivel

42ª Vuelta Ciclista a Burgos
Del 28 de julio al 1 de agosto

Con sus adaptaciones, con sus precauciones, pero vuelve; vuelve el gran ciclismo y lo hace en Burgos. La emergencia sanitaria por el coronavirus puso en duda su celebración. La progresiva adaptación a la nueva normalidad y las fechas previstas originalmente para su disputa acabaron cuadrando de cara a abrir un nuevo calendario de la UCI que, reducido, mutilado, se prolonga hasta noviembre: la Vuelta a Burgos se celebraba. Y con ella, tras el estudio del calendario resultante, el retorno a la competición del Kometa-Xstra Cycling Team.

Y entre esa expectativa previa y la confirmación posterior, una multitud de peticiones de formaciones para tomar parte en el nuevo ciclismo. Burgos, una prueba cotizadísima. La organización, dependiente de la Diputación y con Marcos Moral al frente desde hace años, confirmó la participación de 22 escuadras. “El criterio fue incluir primeros a los españoles, el segundo criterio la fidelidad de los conjuntos habituales y luego los del World Tour, que debían ser 14 por reglamento UCI”, recordaba hace unos días. La participación, es un hecho, va a tener un nivel absolutamente inédito para la prueba.

El húngaro Márton Dina, los italianos Alessandro Fancellu, Antonio Puppio y Riccardo Verza y los españoles Alejandro Ropero, Diego Pablo Sevilla y José Antonio García componen el ‘siete’ que tomará parte en las carreteras burgalesas, sobre un recorrido de casi 800 kilómetros repartido en cinco etapas. La Vuelta a Burgos volverá a concluir en sus icónicas Lagunas de Neila. Y como viene pasando desde su debut en 2017, el Picón Blanco volverá a acoger la carrera; para el tercer día, un final clave, exigente, con sus nueve kilómetros a una pendiente media cercana al 9%. Con una primera etapa en cuesta, en la capital provincial, otras dos jornadas, la segunda y la cuarta, invitan a una resolución al sprint o a un pulso entre la fuga y el pelotón.

“En una carrera con el nivel que va a tener esta Vuelta a Burgos tenemos las ideas muy claras. Estar atentos, rodar juntos y delante, salvar las situaciones de carrera, pelear por estar en las fugas, luchar por las clasificaciones secundarias y, en definitiva, buscar nuestras opciones sin renunciar a ningún sueño. En esta carrera la estructura ha ganado gracias a Matteo Moschetti hace dos años. Además, esta Vuelta a Burgos es muy especial. El ciclismo vuelve a rodar. Viene de tres meses muy malos, donde los estados de forma o la asimilación psicológica de un período tan duro pueden aportar también alguna incógnita”, comenta el director Jesús Hernández.

“La Vuelta a Burgos del año pasado fue toda una experiencia para mí, fue mi primera carrera realmente grande y aprendí mucho”, recuerda Márton Dina, decimonoveno en la general final de 2019. “Estoy impaciente por volverme a poner un dorsal de nuevo, no veo el momento. He trabajado muy duro durante los pasados meses y puedo decir que mi estado de forma es bueno. La sensación será la misma que cuando comienza la temporada, en enero. Pero debido a lo reducida de esta campaña también creo que cada carrera va a ser mucho más dura que en circunstancias normales, por supuesto también Burgos. Todo el mundo es consciente de que sólo tenemos dos o tres meses para demostrar de todo lo que somos capaces. Creo que es muy bueno conocer el recorrido, aún recuerdo algunos puntos que será muy importantes y donde tengo que estar concentrado al 100%”.

Alejandro Ropero regresa a una carrera en la que disfrutó de una primera experiencia en el profesionalismo en calidad de stagiaire. Él rodó en la fuga el mismo día que Matteo Moschetti acabó ganando el sprint. “Aquella Vuelta a Burgos me dio mucha experiencia, me demostró que estaba trabajando bien y que tenía que seguir así de cara a la vuelta al campo amateur; volví con mucha confianza. Es cierto que ahora se afronta de una manera diferente: va a ser la primera carrera del ‘nuevo año’, sabemos que van a haber nervios, muchísimo más nivel. Es más difícil tener peso en la carrera, el peso de otros años, pero vamos a pelear por mostrarnos. Corremos en el mejor escenario posible”.

Las etapas.
28 de julio: Burgos/Catedral-Burgos/Cerro del Castillo (157 km).

29 de julio: Castrojeriz-Villadiego (168 km).

30 de julio: Sargentes de la Lora-Picón Blanco (150 km).

31 de julio: Gumiel de Izan – Roa de Duero (163 km).

1 de agosto: Covarrubias-Lagunas de Neila (158 km).

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